Valoración nutricional

Esta fruta es de bajo contenido energético. Al igual que todas las bayas silvestres, la grosella es fuente de fibra, que ayuda a mejorar el tránsito intestinal, y vitamina C, siendo las grosellas negras mucho más ricas en esta vitamina (177 mg) que las rojas (36  mg). Una ración de grosellas cubre el 90% de las ingestas recomendadas de esta vitamina para la población de estudio, la cual contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo.

En cuanto a los minerales, posee cantidades considerables de potasio y hierro. Las grosellas son también ricas en sustancias polifenólicas, como los flavonoides.

Beneficios para la salud

Roja o negra, la grosella es una buena fuente de vitaminas. La grosella roja debe estar preferentemente madura y fresca, para conservar todo su valor nutritivo. Su contenido en flavonoides y vitamina B ayuda a fortificar los capilares, protegiendo los tejidos del cuerpo y previniendo la arteriosclerosis, la apoplejía y la diabetes.

Las grosellas negras y rojas se recomiendan durante el embarazo y la lactancia; al mismo tiempo, las grosellas intervienen en el desarrollo de los huesos del recién nacido. Estimulan la mejora del sistema inmunológico y la respiración, además de tener propiedades diuréticas.

Las grosellas son frutas diuréticas, principalmente recomendadas para la hipertensión. También previenen los resfriados y las enfermedades gastrointestinales.