Beneficios  para la salud

La col rizada es una excelente fuente de vitaminas K, A y C, además de contener cantidades útiles de manganeso, cobre y fitoquímicos, que se cree que ayudan a combatir ciertos tipos de cáncer. Dado que la col rizada contiene tantos nutrientes diferentes, puede desempeñar un papel importante como parte de una dieta sana y equilibrada.

1 ración (80 g) de col rizada cocida contiene 120 mg de calcio, lo que la convierte en una fuente útil de este importante mineral, especialmente para los veganos y las personas que siguen dietas sin lácteos.

La col rizada es una excelente fuente de folato. El folato es la forma de ácido fólico que se encuentra de forma natural en los alimentos. El ácido fólico es una vitamina B y es importante porque: favorece el crecimiento de los tejidos de la madre durante el embarazo; desempeña un papel en la formación normal de la sangre y contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario.

La col rizada es rica en luteína, un antioxidante que ayuda a mantener los ojos sanos. La col rizada contiene 76 mg de luteína por kg, en comparación con el brócoli, que tiene 17 mg. Los expertos recomiendan consumir entre 6 y 10 mg de luteína al día.

Una ración (80 g) de col rizada cocida contiene una gran cantidad de vitamina A, que contribuye a mantener la piel y la vista en condiciones normales y ayuda al sistema inmunitario a funcionar con normalidad.

Gramo a gramo, la col rizada contiene 17 veces más vitamina C que las zanahorias. Una ración (80 g) de col rizada cocida contiene 57 mg de vitamina C, que es importante porque interviene en la formación de colágeno para los vasos sanguíneos, los huesos, los cartílagos, las encías, la piel y los dientes; contribuye a que el sistema inmunitario funcione con normalidad; aumenta la absorción de hierro y contribuye a proteger las células del daño oxidativo.

La col rizada cruda es una excelente fuente de vitamina K. La vitamina K interviene en la coagulación normal de la sangre y en el mantenimiento de los huesos.